La primera parte de esta carta la voy a omitir por respeto a una persona. Yo no le he entregado esta carta y no lo haré porque pienso que es algo irrelevante a estas alturas. Pero por la profundidad de las palabras de esta carta creí necesario ponerla aquí.

[...] Te lo expreso con palabras porque no quiero que se malinterpreten las cosas. Yo bien que quise, pero después de todo yo ahora mismo sólo quiero que tanto tú como yo seamos felices, cada uno por su lado pero sin olvidarse de lo que pasó. Sin olvidar tampoco que ya no hay maneras ni caminos para volver.

No se lo que la vida nos ha hecho a nuestras vidas; pero en estas condiciones da igual, ya me he olvidado de olvidarte.

Digo esto porque lo siento y porque no quiero que tus deseos sean mis mejores placeres. El dolor terminó por curar lo que no sabemos hacer por nuestros propios medios. Ya me he olvidado.

Mi destino es querer siempre más, pero yo diría que mi destino ahora está algo perdido, confundido. Mi destino corre sin tener a donde ir, mi destino no tiene destino. Siento como si mi futuro era mejor antes de conocerte.

El corazón como siempre me ha jugado una mala pasada. No me arrepiento de haberte querido, pero no debería haberlo hecho. Por mí, sólo por mí. No me he hecho daño, aunque ya no viva en constante alegría. El amor ya no está aquí. Bueno, al final creo que nunca estuvo. Pero la amistad no la quiero perder.

Últimamente mis mejores amig@s son las paredes. Hablo con ellas de cosas del corazón, de mi corazón. Hago paseos en el tiempo, vuelvo a todos los buenos momentos que pasé con chicas. Miro hacia dentro y veo lo que lo que estoy haciendo es tan sólo un reflejo en un espejo, algo sin ninguna razón ni sentido.

No suelo escribir muchas cartas como esta, pocas personas, (y cuando digo pocas son muy pocas) pueden decir que tienen una carta de estas escrita por mi puño y letra. Pero la verdad es que hoy me siento inspirado; sin ninguna razón aparente pero está aquí.

Yo soy muy simple y practico para estas cosas: ya no me importa tu cariño (como amiga no solo me importa, lo necesito). Si ya es muy tarde para quererte, si ya no hay razones para hacerlo.

Yo sólo quiero que sepas que yo siempre estaré aquí. Todo el mundo que me conoce bien sabe que yo siempre intento ayudar, a quién sea, amigo o amiga, padre o madre.

Yo me siento feliz porque nunca te he visto, ni he sabido que hayas llorado por mi o por lo nuestro. Me es indiferente si para ti yo nunca fui alguien, aunque no pase lo mismo por mi parte.

Que importa si te veo con esa tristeza en la mirada, si mi mirada tiene mas tristeza como para que tu llores por la tuya.

La gran verdad es que yo necesito aprender mucho. Yo que creía saber tanto, ser un sabio en estos temas. Me río de mi mismo porque creía haber aprendido la lección hace mucho tiempo. Pero como siempre vuelvo a caer en lo mismo.

Muy bueno... ayer escuche una canción que decía que el mundo es una escuela y la vida es un circo; muy oportuno, a veces creo que soy un payaso, a veces creo que sólo sirvo para adornar y rellenar la vida de los demás... Ese es mi trabajo.

Seguramente pensarás... "Que chulo es este chaval escribiendo esto" "Que coño quiere con esto (perdoname por la expresión)" Pero no quiero eso. Por favor sigue leyendo...

No quiero nada porque se que no puedo tener todo. Sólo me gustaría que la hora de ese ADIOS (en mayúsculas, acuérdate) no sea así. Que sea más amable, menos traumática.

Yo tengo muy presente de que seguramente ya me has olvidado y ni quiero ni soy a sufrir por eso. No quiero que me lleve los sentimientos, que me domine el corazón.

Ahora nos damos cuenta, pero ya es tarde. Ahora sabemos que no deberíamos haber empezado nada serio; tan solo una buena amistad, pero no hay que mirar a lo que pasó, hay que mirar a lo que va pasar.

Ahora puedo estar muy triste mirando hacia la calle, en mi habitación, yo sólo. Pero sé que todo esto pasará y solamente formará parte de mis recuerdos. Como parte de mi vida.

Hace tiempo yo le dije a una chica: Te quiero !!! Ella no sabía que decir, no sabía como actuar. Mas tarde esa misma chica me dijo: Juras que me amas ¿?

Yo dije que sí, en ese momento me equivoqué. Cosas como esas no se juran jamás. Yo se muy bien que ahora ya no voy a jurar.

Juramento es engaño, es instinto humano. Y me di cuenta de ello con el dolor, llorando.

Ya no se que ponerte. En este momento sólo estoy escribiendo por escribir, porque me hace falta sacar todo dentro de mi. Ya era hora...

Haz lo que quieras con esta carta, pero ten en cuenta lo que me ha costado escribirla, pero lo he hecho porque lo sentía, porque me apetecía.

Con todo esto lo único que te pido es que aún teniendo a tus verdadero amigo en otro sitio (vuelve a por ellos, no los pierdas por nada del mundo) quiero que al menos yo pueda decir, mira, esa es ........, (respetaré su nombre) y es mi amiga. Ahora te pregunto:¿ lo podré hacer? ¿Me ayudarás a hacerlo?